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Respuesta corta
Al Jazeera es propiedad del gobierno de Qatar y opera bajo la Qatar Media Corporation, financiada por el estado qatarí. Por tanto, representa plenamente los deseos y anhelos de la nación islamista no democrática de Qatar, que, a partir de 2024, también proporcionó alojamiento a los dirigentes terroristas de Hamás. Este medio de comunicación vilipendia y deshumaniza continuamente las acciones de Israel en los medios de comunicación mundiales y dista mucho de ser objetivo.
He aquí un ejemplo de cómo Al Jazeera es muy parcial contra Israel: la organización publicó el relato falso de una mujer árabe palestina, afirmando falsamente que soldados de las FDI agredían a mujeres árabes palestinas, sin comprobar si la historia ERA cierta. Cuando la historia resultó ser falsa, en lugar de RETRACTARSE, Al Jazeera se limitó a eliminar toda referencia a la MENTIRA.
Respuesta larga
Al Jazeera es propiedad del gobierno de Qatar y opera bajo la Qatar Media Corporation, financiada por el estado qatarí. Por tanto, representa plenamente los deseos y anhelos de la nación islamista no democrática de Qatar, que, a partir de 2024, también proporcionó alojamiento a los dirigentes terroristas de Hamás. Este medio de comunicación vilipendia y deshumaniza continuamente las acciones de Israel en los medios de comunicación mundiales y dista mucho de ser objetivo.
Al Jazeera ha sido acusada sistemáticamente de presentar una imagen sesgada e incendiaria de Israel en los medios de comunicación mundiales. La cadena a menudo vilipendia las acciones de Israel mientras amplifica las narrativas que se alinean con la agenda política de Qatar. Un ejemplo llamativo de este sesgo se produjo cuando Al Jazeera publicó un relato no verificado de una mujer árabe palestina, en el que afirmaba falsamente que soldados de las Fuerzas de Defensa Israelíes (IDF) habían agredido a mujeres palestinas. La cadena no verificó las afirmaciones antes de publicarlas y, cuando más tarde se demostró que la historia era falsa, Al Jazeera no se retractó ni pidió disculpas. En lugar de ello, borró discretamente todas las referencias a la historia inventada, socavando aún más su credibilidad.
Esta pauta de información selectiva y de promoción de afirmaciones infundadas pone de relieve el papel de Al Jazeera no como medio informativo imparcial, sino como plataforma que difunde con frecuencia narrativas concebidas para demonizar a Israel y apoyar los intereses políticos de Qatar.