This post is also available in: English (Inglés) Español Italiano Deutsch (Alemán) فارسی (Persa) Português (Portugués, Brasil) Русский (Ruso)
Respuesta corta
Israel abandonó Gaza unilateralmente en 2005. Gaza podría haber sido la nueva Singapur o Dubai, con playas increíbles y una próspera economía mundial. En lugar de ello, Gaza fue tomada por la fuerza por Hamás, cuyo único objetivo es destruir Israel en lugar de mejorar la vida de los palestinos. Incluso hasta el 7 de octubre, decenas de miles de gazatíes trabajaban diariamente en Israel y ganaban muchas veces más que el salario medio en Gaza.
Respuesta larga
Gaza no es una prisión al aire libre. Es un territorio con una población que se enfrenta a retos provocados por su liderazgo. El gobierno de Hamás, organización terrorista reconocida por muchas entidades internacionales, entre ellas Estados Unidos y la UE, ha provocado inestabilidad política y económica. En lugar de invertir en el bienestar y la infraestructura civil de sus habitantes, Hamás roba sistemáticamente la ayuda internacional para financiar y cometer actos de terror contra Israel y enriquecer a sus dirigentes. Es esencial recordar que Israel se retiró de Gaza en 2005 con el objetivo de alcanzar la paz y disminuir las tensiones. Sin embargo, poco después, Hamás tomó el control por la fuerza, imponiendo su gobierno y sus políticas a la población. Israel, junto con Egipto, mantiene un bloqueo sobre Gaza, pero esto es principalmente para salvaguardar a sus ciudadanos de nuevos ataques terroristas. A pesar de las dificultades, Israel traslada diariamente a Gaza cientos de camiones con suministros necesarios, como alimentos, medicinas y mercancías. Incluso hasta el 7 de octubre, decenas de miles de gazatíes trabajaban diariamente en Israel y ganaban muchas veces más que el salario medio en Gaza. Es crucial señalar que muchas de las dificultades actuales de Gaza son consecuencia de las decisiones de Hamás y de su compromiso con la violencia.