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Respuesta corta
Todo se reduce a esto: Los dirigentes de Hamás se aprovechan de la muerte de los gazatíes para vivir lujosamente en el extranjero. ¿Cómo? Hamás anima a los gazatíes a convertirse en mártires o directamente los mata, y espera a que el dinero de la ayuda llegue a raudales. Hamás controla el Ministerio de Sanidad de Gaza e infla el número de muertos para provocar la indignación internacional, por lo que es imposible saber cuántos civiles han muerto realmente. Hamás tiene las manos manchadas con la sangre de su propio pueblo.
Respuesta larga
Es evidente que Hamás tiene un gran interés en inflar las cifras de muertos en Gaza para aumentar la indignación internacional contra Israel. No distingue entre víctimas civiles y terroristas, lo que infla aún más el número de muertos. Hamás tampoco dice nunca cuántas de las personas muertas en Gaza lo fueron realmente por cohetes de Hamás o de la Yihad Islámica: sólo en esta guerra, más de mil cohetes fallaron, matando a innumerables civiles. Hamás no incluye las muertes de civiles que causa directamente cuando obliga a los civiles a no evacuar las zonas de combate para utilizarlos como escudos humanos. Muchos de los «niños» que Hamás afirma que forman parte de sus estadísticas son terroristas armados de 17-18 años a los que se enseñó desde su nacimiento a matar judíos. Hamás controla el Ministerio de Sanidad de Gaza, por lo que es imposible confiar en sus informes: sólo explota las muertes de los gazatíes en su propio beneficio. Hamás tiene las manos manchadas con la sangre de su propio pueblo.
