La sociedad palestina está actualmente muy radicalizada. En las escuelas de la UNRWA se enseña a los niños desde que nacen que su objetivo final es asesinar a israelíes y convertirse en mártires. Las mujeres están orgullosas de tener muchos hijos porque así pueden enviar a más terroristas para que se conviertan en mártires. El apoyo a la masacre perpetrada por Hamás el 7 de octubre es abrumador tanto en Gaza como en Cisjordania, según las últimas encuestas. Existen abundantes pruebas sobre el terreno del apoyo material a Hamás por parte de palestinos corrientes de Gaza mediante la custodia de armas y conductos a túneles terroristas en sus propias casas, a menudo en las habitaciones de sus hijos. Esta no es una sociedad que pueda coexistir pacíficamente con nadie sin una gran reeducación y el establecimiento de nuevas normas sociales.
Ejemplo de palestinos burlándose y quemando panfletos lanzados por las FDI en las que se decía a los palestinos que evacuaran para no correr peligro.
Hamás -gobierno electo de Gaza y movimiento terrorista ampliamente apoyado por todos los palestinos- dice que no tiene interés en una solución de 2 Estados y que sólo busca apoderarse de Israel.